El Programa Ripple Eect iniciado por el Distrito 5550 en Canadá ha invertido más de US$ 2.4 millones desde 1999 para construir y restaurar más de 80 escuelas en la zona rural de Guatemala, así como para otorgar cientos de becas. El Club Rotario de Quetzaltenango se asoció con el Club Rotario de Kenora, Ont., para construir seis aulas, incluyendo un laboratorio de computación, en la Escuela Llanos de la Cruz. Cinco clubes en el Distrito 5550 (Manitoba y partes de Ontario y Saskatchewan) financiaron la iniciativa de US$ 60,000; los rotarios de Quetzaltenango supervisaron la construcción y proporcionaron materiales y contribuciones en especie.
Además, los clubes Rotarios Guatemala La Reforma y Kenora se unieron a Fundación Novella en la construcción de una escuela en comunidad Llanos de San Juan Sacatepéquez. En el proyecto participan además padres de familia, autoridades locales, representantes del Ministerio de Educación y la municipalidad de la localidad. Llanos de San Juan es una pequeña comunidad en San Juan Sacatepéquez. Su población es de alrededor de 80 familias, es decir, unas 400 personas. Actualmente, los niños de la localidad habían estado recibiendo clases de preprimaria y primaria en una infraestructura dañada y no apta para el estudio. Por lo anterior, se decidió construir un centro educativo nuevo, en un terreno propiedad del gobierno local que se adquirió para albergar la escuela, que constará de tres aulas, baños para niños y niñas, una estación de lavado de manos, cocina, almacén y la oficina del director. Asimismo, contará con tanques elevados para ahorrar agua.
Club Rotario Tikal Petén: contribuye a salvar vidas
“Lamento informarle que su niña falleció”, son palabras que la mamá de Amanda jamás olvidará. Ella nació el 26 de octubre de 2014 en el Hospital Regional de San Benito, Departamento de Petén, Guatemala. Su edad gestacional fue de 35 semanas y su peso al nacer de 4 libras. Su vida fue de 24 días. Ella es uno de los muchos casos de niños prematuros, que fallecían, entre otras causas, por falta de equipo médico para su adecuada atención.
El hospital de San Benito es el centro hospitalario de referencia para la región. En 35,854 km² es el que debe brindar atención médica a los habitantes del departamento, pues a pesar que existen otros tres hospitales distritales en el área, es el único que cuenta con unidad de cuidados intensivos para niños y adultos.
Es el que tiene el mayor espacio de encamamiento distribuido en salas de hombres y mujeres, sala de ginecología y obstetricia y pediatría. Cuenta también con un banco de sangre, laboratorio, rayos X, y una emergencia de 24 horas.
Hay médicos de turno, un programa de entrenamiento a residentes de pediatría y ginecología y obstetricia, especialistas en medicina interna, cirugía, nefrología, neurología, oftalmología y cardiología, entre otros. Pareciera un hospital muy completo pero si tomamos en cuenta que debe brindar cobertura a casos que requieren más que una atención primaria a una población de 687,192 habitantes, no suena tan completo. Asimismo, es el centro de referencia para los habitantes de Belice y México que viven en poblados cercanos Petén.
Conocer los números alarmantes de muertes en niños y poca cobertura para partos motivó el proyecto para el fortalecimiento del área materno-neonatal del mencionado hospital. En 2012, el Club Rotario Tikal Petén con apoyo de los Clubes de Longview, Longview-Greggton, Marshall, Texarcana Sunrise, Carthage y Cedar Creek Lake, iniciaron el Global Grant 14117922 para dotar al hospital con equipo de bombas de infusión, perfusores, monitores, incubadora, foto terapia y un oftalmoscopio. Además, se trabajó con el fortalecimiento de la atención materno infantil a nivel primario con capacitaciones a 179 comadronas en el área rural de Petén. Las estadísticas demuestran que no ha habido hasta el momento una muerta materna más en partos atendidos por comadronas que recibieron la capacitación. La mortalidad de prematuros en el hospital se redujo un 60% en estos seis meses.
El 1 de febrero de este año, se celebró la llegada del equipo nuevo y se supo que este equipo generaría mejores oportunidades para los pacientes. El conocer la experiencia de familias en quienes, este proyecto hizo una diferencia de salvarles la vida, es de gran motivación, tal es el caso de Gabriela, quien nació el pasado 25 de abril, con una edad gestacional de 30 semanas, un peso de 1.75 lbs. y midiendo apenas 34 cms. Estuvo en el área de neonatos por 2.5 meses. Usó el equipo desde la incubadora; en la sala de lactancia estuvo en plan canguro, tuvo soluciones por medio de bombas de infusión, recibió fototerapia y evaluación oftalmológica con oftalmoscopio indirecto para prevención de la retinopatía. ¡Todo el equipo donado por Rotary! Gabriela egresó del hospital pesando 4 libras. Hoy es una historia feliz que contar. Sin embargo, hay mucho aun por hacer. El Club Rotario Tikal Petén continuará con su esfuerzo para continuar contando historias felices.