Por Reyes Aguirre Chávez
Presidente del Club Rotario La Chorrera 2017-2018. Panamá.
Ser Rotario es un gran honor para mí. Los principios rotarios son coherentes con la vida que me enseñó mi padre. Mi padre siempre una persona de ética, con compromiso de palabra, («Lo que se dice, se hace») y de hermandad; con vocación de ayudar sin esperar nada a cambio. Puedo decir que en el Club Rotario de La Chorrera he encontrado una extensión de mi familia pues mis compañeros son personas con el mismo pensar. Juntos hemos trabajado arduamente para servir a nuestra comunidad.
Cuando veo a mis hijas entusiasmadas por participar de las reuniones y de las actividades que realizamos, siento una satisfacción espiritual porque sé que serán personas de bien, que seguirán el legado que nos une como rotarios: «Dar de sí antes de pensar en sí».
Somos una familia, y como tal, nos apoyamos dentro y fuera del club. Hemos creado un vínculo fraternal de amigos, amigas, tíos, tías y sobrinos, donde cada uno es muy importante a la hora de crear nuestros objetivos y metas.
Rotary ha sido el punto medio entre lo que soy y lo que quiero ser como persona de valor ante la sociedad.