Las Escuelas de Patio, el Método FRESPON
Por Freddy Santana
Club Rotario SD Poniente
«El proyecto de las Escuelas de Patio, Método FRESPON, nace para resolver un grave problema de la humanidad que frena el avance de los pueblos, que anestesia las ansias de superación del ser humano, que lo echa al rincón del olvido y lo expone al agobiante sol de la explotación del hombre. Ese grave problema es el analfabetismo.
El proyecto de luchar, para resolver el analfabetismo de los adultos de nuestro país y del mundo tiene 6 años y medio de existencia. Hemos inaugurado 3,978 Escuelas de Patio, y graduado a 39,943 personas adultas y 4,127 niños, ahora todos alfabetizados.
En realidad, tratamos de resolver: utilizamos útiles escolares como cuadernos, lápices, gomas de borrar, tizas, borradores de pizarra, pizarrones, libros, cuadernos, y, por supuesto, Fotografía por el Método FRESPON». (Freddy Santana).
Se ha traído a la atención mundial que hay alrededor de 1,000 millones de analfabetos, dos tercios de los cuales son mujeres, y que 130 millones de niños nunca han asistido a una escuela. Lo importante para nosotros es alfabetizar.
¿En qué consiste el proyecto?
Es un sistema de alfabetización que dura cuatro meses para alfabetizar a una persona de intelecto normal. El mecanismo de instrucción se basa en una plataforma ágil, práctica, rápida, que se llama Método FRESPON.
Este método comienza por la palabra que más les interesa a nuestros estudiantes, que son personas trabajadoras informales, los obreros de las calles, los trabajadores informales, los vendedores ambulantes, los que día a día sudan en el pavimento de las avenidas vendiendo de todo para poder llevar poco dinero, el estrictamente necesario, que permitirá a sus hijos continuar sobreviviendo en esta vorágine que es la vida de los humanos.
Esa palabra tan necesaria es dinero. Con esa palabra hecha moneda ($) pueden sobrevivir. Así comienza el Método FRESPON: «En estas clases se intercalan algunos temas de matemática: contar, sumar, restar, dividir, multiplicar, etc.».
¿Cuál es el objetivo de las Escuelas de Patio? Alfabetizar a 3 millones de dominicanos en 5 años; 26 millones en el Caribe en 5 años; 72 millones de latinoamericanos en otros cinco años; 660 millones en el continente africano; cientos de millones de analfabetos en el asiático, y de esta forma erradicar el analfabetismo como mal en la humanidad.
¿Cómo formar una Escuela de Patio?
Lo primero que se debe hacer es conseguir una persona de entre 18 y 65 años que haya cursado el octavo grado, que esté de acuerdo y dispuesta a aprender el Método FRESPON y que saque una hora y quince minutos durante las tardes de 5 días laborales de la semana para dar clases.
Luego de conseguir a esta persona (preferiblemente una señora), se pasa al segundo paso: buscar a las personas que no saben leer ni escribir. Además de esto, se le hace saber que no tiene que pagar. Al contrario, le vamos a regalar los útiles, desde la pizarra, tizas, borrador, cuadernos y lápices, hasta la goma de borrar y todo lo demás.
La escuela provee, además, 1 pizarra, 1 borrador de pizarra, 1 caja de tizas, 20 cuadernos, 20 lápices, 20 gomas de borrar y 20 libros del Método FRESPON.
¿Dónde se imparten las clases?
En una casa, un salón del centro comunitario, una sala de espera, una oficina del dispensario médico comunitario… nunca en la escuela pública de la zona ni en el colegio privado. Puede ser en un salón de una iglesia, la sala de una casa, un patio de una casa.
Está de más decir que el(la) maestro(a) debe ser entrenado(a) con el Método FRESPON. Conociendo el método, estos maestros podrán enseñar al alumnado.
Hay mayores esperanzas de progreso cuando todas las personas entienden los manuales, las señales, los libros, los panfletos y los reglamentos; cuando todas las madres saben leer las recetas para administrar correctamente los medicamentos de sus hijos, y las abuelas las de sus nietos; que todo obrero sepa leer su contrato, que sepa exigir lo que le corresponde y lo firme siendo consciente de lo que dice. ¡Sí se puede!