LA JUVENTUD EN ROTARY
¡Es un honor ser rotario!
Por Robert Nina S.
Club Rotario San Cristóbal
Rotary llegó a mi vida de una manera muy bonita e inesperada. Vivía con mis padres en una comunidad muy humilde de San Cristóbal; éramos una familia de clase media, la cual no tenía los suficientes ingresos para cubrir mis gastos educativos. De pequeño tuve que asistir a un centro educativo público, donde me trataban muy bien, me educaban con amor, y, con el tiempo, mis profesores se convirtieron en mis segundos padres.
Años más tarde, una vez culminados mis estudios universitarios, conocí a un ser humano lleno de bondad y de corazón puro llamado Melvin Brioso, quien me invitó a participar en una reunión de amigos que se hacían llamar rotarios.
Durante la reunión salieron a relucir mis orígenes y, con ellos, aquella gran escuela que tanto disfruté y aproveché en mi infancia y juventud; inmediatamente, el aura dentro del salón cambió, y con una gran sonrisa y llenos de júbilo me contaron cómo esa escuela había sido creada por su club para que las familias de escasos recursos pudieran darles educación de calidad a sus hijos.
En ese momento mi vida cambió, me sentí tan afortunado de poder conocer una institución que cuidó de mí sin pedirme nada a cambio, y que por medio de sus múltiples proyectos ha venido cautivando los corazones de muchas familias gracias a su apoyo incondicional.
Temprano ese año, tuve el honor de asumir el cargo de presidente de Imagen Pública, para posteriormente ser electo como presidente del club a mis 26 años. Asumí este nuevo reto con valentía, pese a la crisis sanitaria que vivimos en todo el mundo por la pandemia de COVID-19.
Recuerdo que el lema rotario de ese año fue Rotary conecta el mundo, el cual sin duda formó parte de nuestro día a día, inspirándonos a seguir ayudando a la comunidad, incluso en la distancia.
Ser rotario joven es una tarea retadora, pero a la vez gratificante, que te brinda la oportunidad de dar lo mejor de ti, inculcando principios diferenciadores y fortaleciendo nuestra capacidad de servir para el bien de los demás.